Plata Paniagua S, Montero Delgado JA, Arenas Villafranca JJ
Especialistas en Farmacia Hospitalaria. Responsables de la Asociación Stop Errores de Medicación (España)
Fecha de recepción: 10/10/2019 – Fecha de aceptación: 11/10/2019
Desde hace más de 20 años los errores de medicación son considerados una fuente de morbimortalidad muy relevante en todos los sistemas sanitarios. Es por ello, que la Seguridad del Paciente (#SegPac) relacionada con el uso de los medicamentos es un objetivo prioritario dentro del Sistema Nacional de Salud1.
En multitud de bibliografía, incluidos los planes estratégicos de los sistemas de salud autonómicos, se recogen las buenas prácticas y las medidas preventivas más efectivas para disminuir la aparición de estos errores y mejorar la cultura de seguridad.
En ocasiones, estas estrategias se componen de una infinidad de buenas prácticas que no suelen adaptarse a la realidad diaria de los profesionales sanitarios que intervienen en el circuito del medicamento, haciendo que sea difícil su implementación y cumplimiento. Debido a ello, existe en España bastante heterogeneidad en la integración de acciones preventivas contra los errores de medicación e incluso, en muchos casos, dichas medidas son desconocidas por los propios profesionales.
En este contexto, cabe preguntarse: ¿cuántos profesionales conocen estas estrategias y las integran en su día a día?, ¿son efectivos los canales utilizados para comunicar las recomendaciones sobre seguridad de los medicamentos?, ¿en qué medida éstas ayudan a mejorar la cultura de seguridad de los profesionales sanitarios?
Para la implementación efectiva de estas diferentes acciones y estrategias se hace imprescindible una visión clara y un compromiso real por la #SegPac por parte de los dirigentes e instituciones sanitarias. Más allá de los necesarios recursos económicos, materiales o humanos, promover continuamente la cultura de seguridad dentro de la organización y facilitar la adopción de las buenas prácticas de seguridad adaptadas a cada microentorno parece ser la clave para la reducción de los errores de medicación2.
Los errores de medicación, al ser incidentes con capacidad para generar daño en los pacientes, siempre han tenido una connotación negativa, y usualmente se responsabiliza a las personas involucradas en el error de manera directa. Esto provoca que los errores se oculten por miedo a represalias legales y no se comuniquen adecuadamente, lo cual ha afectado negativamente a su notificación y a la concienciación del profesional acerca de este problema. Éstas, entre otras, son las principales causas de que los errores de medicación en España estén infranotificados, infravalorados e infraestudiados.
Por ello, hoy en día uno de los mayores retos al que nos enfrentamos a la hora de conocer y analizar los errores de medicación es la falta de difusión efectiva de los mismos. Hasta hace no demasiado tiempo, los canales de comunicación oficiales que proveían de información acerca de seguridad del medicamento carecían de mecanismos y herramientas para transmitir dicha información de forma rápida, en tiempo real y masiva a los profesionales sanitarios, cuidadores y a los pacientes. Esto provocaba una falta de información y una tremenda lentitud a la hora de adoptar medidas correctivas o preventivas para que esos errores no se volvieran a producir o se pudiera minimizar el daño. Además, la carencia en algunas ocasiones de un entorno de transparencia y no punitivo, como ya hemos señalado, que haga que el profesional se sienta cómodo comunicando los errores dificulta el conocimiento de los mismos y por tanto la implantación de medidas que puedan evitarlo en un futuro. No debemos perder de vista en ningún momento que los errores graves relacionados con la medicación que alcanzan al paciente son evitables, y que el retrasar o no impulsar debidamente la implantación de una cultura de seguridad del medicamento en un sistema sanitario causa una negligente demora en la búsqueda de soluciones para eludir de forma real, desde la práctica clínica diaria, esos errores graves.
En la era digital que vivimos, las redes sociales (RRSS) se han convertido en las herramientas de comunicación más populares y utilizadas para buscar información sobre salud3, permitiendo que el acceso a la información sea universal e instantáneo. Tanto es así, que algunas RRSS como Twitter, se han convertido en el foro de debate principal de temas relacionados con la salud y muchos profesionales ya optan por esta vía para actualizarse en información médica, incluida la #SegPac4.
En este marco, surgió en 2013 Stop Errores de Medicación (@StopErroresMed), en respuesta a una necesidad y como una vía alternativa a los canales habituales de información y la difusión de información relacionada con la seguridad del paciente, y en concreto, del medicamento.
@StopErroresMed dispone de un sitio web (www.stoperroresdemedicacion.org) con un blog donde se publican artículos originales elaborados por los distintos autores. Alternativamente, gracias a sus perfiles sociales en Twitter y Facebook, estos y otros contenidos pueden ser compartidos por la comunidad, fomentando así un mayor alcance de la información.
El tipo de contenido publicado es variado e incluye la isoapariencia de medicamentos, noticias generales relacionadas con la seguridad de los medicamentos, recursos docentes-educativos de utilidad, información sobre prevención de errores con diferentes grupos de medicamentos, medidas de prevención de errores de medicación en los distintos servicios clínicos hospitalarios, entre otros diversos temas.
Además de las publicaciones en el blog, el potencial de @StopErroresMed reside en que genera contenido de forma diferente, original y más visual, algo tremendamente importante para que la información sea asimilada y retenida por el receptor. Esta manera de transmitir la información permite captar el mensaje esencial de forma rápida basándose principalmente en infografías, imágenes y mensajes de alto impacto que son altamente efectivos, sin perder rigurosidad científica.
Otro de los aspectos más reseñables de la plataforma, y un valor añadido de la misma, es su carácter multidisciplinar en el que se trata de dar cabida a todos los profesionales de todos los ámbitos sanitarios, lo que ha enriquecido la información publicada aportando diferentes puntos de vista, algo que se echa de menos en el ámbito sanitario que tiende a la endogamia y al aislamiento de los diferentes colectivos.
Actualmente @StopErroresMed cuenta con más de 12.000 seguidores en Twitter y más de 20.000 en Facebook, una cifra nada desdeñable que denota el éxito del proyecto ya que las publicaciones tienen un alcance considerable y llegan a un gran número de lectores. Por otro lado, la web @StopErroresMed ha recibido más de 400.000 visitas en 6 años, una media de 5.500 visitas al mes, además de millones de visualizaciones de su contenido publicado en redes sociales. Los números son sólo números, pero la importancia de estas cifras radica en que demuestran que la información llega de una forma eficiente a una gran cantidad de lectores, resultando ésta de interés para ellos y generando gran cantidad de interacción social en las diferentes plataformas. Uno de los objetivos de @StopErroresMed es que su contenido se “viralice” lo máximo posible, ya que idealmente entendemos que a cuantas más personas lleguen las publicaciones, mayor será la probabilidad de crear una cultura de seguridad a través de internet y, por tanto, mayor éxito en la reducción de errores de medicación tendrá a nivel global.
Proyectos como @StopErroresMed aportan un gran valor debido al potencial impacto que suponen en la cultura de seguridad de los profesionales e incluso de los pacientes, pero exigen dedicación, creatividad, análisis y una innovación constante para no caer en la rutina y seguir despertando interés e interacción. Desde sus inicios, @StopErroresMed siempre ha tenido un carácter altruista y por ello, con el objetivo de profesionalizar e institucionalizar el proyecto, desde enero de 2019 ha pasado a ser una asociación sin ánimo de lucro y todos los ingresos que se perciben procedentes de aportaciones, colaboraciones y conferencias se revierten en el proyecto, quedando detallados en el portal de transparencia de la web.
De cara al futuro, sería interesante que proyectos similares a @StopErroresMed formaran parte de los organismos que velan por la calidad y la seguridad en la asistencia sanitaria y se integraran y/o formaran parte de las estrategias de seguridad de los servicios de salud sin perder frescura e identidad, ya que la comunicación efectiva y la difusión de la información promueve la cultura de seguridad, siendo este un objetivo prioritario de la Organización Mundial de la Salud y del Servicio Nacional de Salud1 a la hora de disminuir los errores de medicación.
Estrategias de comunicación adaptadas a la nueva realidad digital que incorporen nuevos canales y formatos permitirán a estas instituciones sanitarias que la información llegue a los profesionales sanitarios, cuidadores y pacientes de una forma más efectiva, lo cual es fundamental a la hora de inculcar y mejorar una cultura de seguridad de los medicamentos que permita la disminución de los errores de medicación. Este es el objetivo real que debemos perseguir y depende de cada uno de nosotros que lleguemos a conseguirlo en un futuro lo más cercano posible.
– En inglés, elephant in the room (“elefante en la habitación”) es una expresión metafórica que hace referencia a una verdad evidente que es ignorada o pasa inadvertida. También se aplica a un problema o riesgo obvio que nadie quiere discutir. –
BIBLIOGRAFÍA
1. Ministerio de Sanidad, Servicios sociales e igualdad. Estrategia de seguridad del paciente del Sistema Nacional de Salud Período 2015-2020. Madrid: Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e igualdad. Centro de publicaciones; 2016. Consultado el 10/09/2019.
2. Trbovich P, Shojania KG. Root-cause analysis: swatting at mosquitoes versus draining the swamp. BMJ Qual Saf. 2017 May;26(5):350-353.
3. Rolls K, Hansen M, Jackson D, Elliott D. How Health Care Professionals Use Social Media to Create Virtual Communities: An Integrative Review. J Med Internet Res. 2016;18(6):e166. Published 2016 Jun 16. doi:10.2196/jmir.5312.
4. Pershad Y, Hangge PT, Albadawi H, Oklu R. Social Medicine: Twitter in Healthcare. J Clin Med. 2018;7(6):121. Published 2018 May 28. doi:10.3390/jcm7060121.
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